Por: Montserrat Oseguera | @Peckerpecas
La calle de las Sirenas es una canción que te remonta a una época bastante atractiva, si a ti te tocó escucharla en la época de los noventa, te gustará ver esta película.
¿Cómo matar a mamá? trata sobre Rosalinda, una mujer que sufre demencia senil. Sin importar la mala relación que tiene con sus tres hijas, en un momento de lucidez decide contarles sobre su enfermedad, pidiéndoles que le ayuden a quitarse la vida.
Con base en esa decisión, veremos diferentes escenarios, donde podrán reencontrarse asertivamente entre lo que es ser una figura materna y un ser humano.
En esta historia, algo realista es la relación entre madre e hijas y la necesidad por ser verdaderamente conscientes sobre lo que conlleva ser una madre oprimida y herida.
Otro tema fundamental es la crianza en pareja, la estructura de poder y las dinámicas de género, pues Carla Sierra escribe para derribar tantos mitos y creencias aún existentes en México, sobre las familias tradicionales en cualquier clase social. Un ejemplo aquí es Margo (Ximena Sariñana), quien vive atada a la crianza de sus hijos, siendo uno de los abusos más comunes en la maternidad de tiempo completo.
En esta película dirigida por José Ramón Chávez Delgado retoma un tema sensible con cierto toque cómico. Lo maravilloso, lo cansado, lo horrendo de ser madre y decidir no serlo, abre un lente analítico más atractivo para el cine comercial, que si bien, la estética es idéntica a una chick flick, con personajes populares en ese ámbito, la audiencia apreciará un guion que tiene algo más para ofrecer.
¿Cómo matar a mamá?, aún con esta fórmula muy vista en la comedia mexicana, ofrece momentos con los cuales es inevitable no empatizar, a través de varias situaciones en las que se inmiscuye Rosalinda (Blanca Guerra), así como preguntarse por el vínculo propio entre tu madre y tú.
Sin embargo, hay algunos elementos cuestionables en la cinta, uno es el movimiento excesivo de cámaras para enfocar a cierta marca de autos o los típicos “galanes telenovelescos” a quienes no les crees su diálogo ni su actuación. O bien, la necesidad por meter a un standupero que verdaderamente no aporta a la historia, quitándole mayor credibilidad a la trama y seriedad a los momentos importantes.
¿Cómo matar a mamá? es un viaje de 95 minutos para conocer algunas partes bellísimas de nuestro país; un viaje para disfrutar con mamá y pasar un buen momento entre amigos o familia.
No te pierdas ¿Cómo matar a mamá? en cines.
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