Bixistranha, loka preta da favela
Quando ela tá passando todos riem da cara dela
Mas, se liga macho, presta muita atenção
Senta e observa a sua destruição (….)
Letra de Bixha Preta
Marica rara, loca negra de la favela
Cuando está pasando todos se ríen de ella
Pero toma nota macho, presta mucha atención
Siéntate y observa tu destrucción (….)
Letra de Bixha Preta
Por: Paloma Cabrera | @paloma_cabreray
Marica, loca, negra de la favela, así se autodenomina la protagonista del documental, la artista trans Linn da Quebrada en Marica-travesti (Bixa Travesty, en su idioma original). Dirigido por los brasileños Kiko Goifman y Claudia Priscilla, la película entrelaza tres aspectos: la vida personal de Linn, presentando a sus amigos o a su amorosa madre; sus enérgicos shows en vivo donde viste colores brillantes y su guante de la buena suerte; y una serie de irónicas reflexiones dramatizadas en radio sobre el machismo o la transfobia con su amiga y compañera de escenario, Jup do Bairro.
Sin embargo, este no es un documental sobre Linn da Quebrada, es un filme con ella como hilo conductor, donde lo más relevante radica en poner sobre la mesa el poder de los cuerpos y su capacidad de volverse insumisos; de la importancia de volverse resistentes contra los discursos hegemónicos sobre la sexualidad y los cánones de belleza.
Linn transforma su cuerpo en una especie de herramienta política y artística no solo durante sus presentaciones, sino en su vida diaria, cuestionando sus propios límites marcados por sus órganos sexuales. ¿Cómo debe ser el cuerpo de la travesti? ¿este cuerpo debe estar ligado al concepto femenino? ¿qué es lo femenino? ¿debe estar unido a la hormonización? ¿a la depilación? son algunas de las preguntas que se lanzan directamente al espectador.
Las letras de las canciones y la música son un arma, casi una ametralladora, que cuestiona los paradigmas sociales regidos por los preceptos heteronormativos, machistas y blancos. No es una mera casualidad que los performances estén acompañados de funk originario de las favelas, un género de las periferias que tradicionalmente han colocado el cuerpo de la mujer en el centro de las rimas. Sin embargo, aquí Linn da Quebrada le da un giro y realiza un funk crudo, feminista, sin censura, queer y casi autobiográfico. Quizás considerado por algunas personas como violento, pero congruente con la tesis del movimiento: Toda creación implica destrucción. O como lo plantearía Michel Foucault, la resistencia no radica simplemente en decir no, se trata no solo de resistir, sino en crear y recrear. Cambiar la situación.
Brasil (como muchos países de la región) ha decidido volver invisibles estos cuerpos y se ha convertido en el país donde más homosexuales son asesinados, además de ser líder mundial en los rankings de homicidios contra transexuales y travestis. Es por esto que el proyecto de Linn Da Quebrada, va más allá de la música; se vuelve un performance político, radical y necesario para una época donde han resurgido movimientos conservadores de ultra derecha no solo en aquél país del sur.
Deja una respuesta