Por: Brenda Marquezhoyos | @brendamaryos
Si el pop fuera un videojuego, Chappell Roan no estaría subiendo niveles, estaría cambiando todo el mapa. Desde que apareció con sus pelucas increíbles, letras afiladas y videos que parecen salidos de un sueño queer con presupuesto de cine independiente, la artista de Missouri ha convertido cada lanzamiento en una pequeña revolución estética. En 2025, con “The Subway” liderando listas y discusiones en foros de música, su videografía se consolida como un ejercicio de estilo y un manifiesto visual sobre identidad, deseo y espectáculo.
Más que simples acompañamientos de sus canciones, sus videos son cápsulas cinematográficas en las que convergen fotógrafas, directoras, productoras, diseñadoras y estilistas que han construido, plano a plano, el universo de la Midwest Princess. La presencia femenina detrás de cámara no es casualidad. Roan ha tejido una red de talento técnico y creativo que rompe el molde en una industria aún dominada por hombres.
“The Subway”: los tres grandes minutos
Con su lanzamiento el 1 de agosto de 2025, “The Subway” debutó en el número uno de Spotify USA con 3.9 millones de reproducciones en un día. También escaló directo a la cima de YouTube y iTunes, consolidando a Roan como una de las artistas pop más relevantes de la década. La canción, un blush melancólico de dream pop ochentero e indie rock, conecta con sus fans por sus letras vulnerables y su doble lectura: una historia de desamor y un homenaje a Nueva York, con su mezcla de esperanza, desengaño y resiliencia.
Rodado en 35 mm por la directora Amber Grace Johnson, “The Subway” es un ejemplo de cómo la cotidianidad puede convertirse en un drama urbano de alta intensidad. La narrativa sigue a una protagonista que cree reconocer a una mujer en el metro y la persigue, solo para perderla. Entre el cabello larguísimo que se enreda en taxis y basura —metáfora visual del peso emocional—, y los contrastes de vestuario vibrante diseñados por Genesis Webb, la pieza se mueve entre lo romántico, lo melancólico y lo camp.
La dirección creativa de Ramisha Sattar, junto al trabajo de la diseñadora de sets Maris Jones, da coherencia a un mundo en el que la estética queer es natural y expansiva. Incluso el cameo de la mítica “Green Lady of Brooklyn” añade una capa surrealista y urbana que solo podría darse en Nueva York.
Ahora que la industria del pop parece obsesionada con videos genéricos grabados en pantallas verdes, “The Subway” recuerda que el cine sigue vivo en la música, y que la textura de la película, la luz real y la dirección precisa no tienen sustituto digital.
Cómo se construyó un lenguaje visual
“My Kink Is Karma”
Lanzada en 2022, esta canción encontró su auge en 2024 como parte de la ola de sleeper hits que catapultaron a Roan a las listas globales. Con producción de Dan Nigro, la pieza escaló en el Billboard Hot 100 y consolidó su imagen como artista que no teme ser incómoda y teatral. El video, dirigido por Hadley Hillel y producido por Gia Rigoli, con maquillaje extremo inspirado en Him de The Powerpuff Girls, revirtió la expectativa de un clip sexualizado para apostar por lo grotesco y juguetón. Este enfoque le dio identidad propia y reforzó su presencia en la cultura pop queer, generando conversación en redes y convirtiendo su look en material de cosplay y fan art. El corazón blanco pintado en su rostro, la sombra azul intensa y los cuernos rojos la convierten en una figura teatral que encarna una toxicidad consciente y satírica.
“Casual”
Publicada de forma independiente en 2022 y luego integrada a The Rise and Fall of a Midwest Princess, “Casual” se viralizó en 2024, acumulando millones de reproducciones y apareciendo en las listas junto a otros seis temas suyos de forma simultánea, algo inusual para una artista emergente. El video, también dirigido por Hillel, llevó la metáfora de una relación superficial a la imagen de un romance con una sirena. La cinematografía de Ryan Clemens y el diseño de Marc de Bertier construyen una narrativa visual que acompaña el arco emocional de la protagonista, de la ingenuidad inicial a la recuperación de su identidad.
“Hot to Go!”
Cuando se estrenó en agosto de 2023, no fue un éxito inmediato, pero el boca a boca y la viralidad en TikTok lo impulsaron meses después hasta el top 20 de varios países, incluyendo EE. UU., Irlanda y Reino Unido. El video, dirigido por Jackie! Zhou, es un homenaje a su ciudad natal, Springfield, y a su infancia soñando con ser animadora. Con fotografía de Ryan Lee Clemens y producción de Gia Rigoli y Vero Kompalic, la pieza mezcla nostalgia, comunidad y orgullo queer local, e incluye a sus abuelos y drag queens de la región. Su autenticidad ayudó a reforzar su narrativa de artista que no olvida sus raíces, ganándole un cariño especial en su base de fans.
“Pink Pony Club”
Lanzada en 2020, esta canción se convirtió en su carta de presentación ante un público más amplio, pero fue en 2024 y 2025 cuando explotó como sleeper hit, llegando al top 10 del Billboard Hot 100 tras su actuación en los Grammy. El video, dirigido por Griffin Stoddard, es un retrato celebratorio de la vida nocturna queer, con cameos de leyendas drag como Victoria “Porkchop” Parker y Meatball. La coreografía de Ashley Robicheaux y el diseño de producción de Armando Vernet capturan un momento de utopía comunitaria que, para muchos fans, define la esencia de Roan, convertir la marginalidad en fiesta, y la vulnerabilidad en espectáculo.
El equipo femenino que sostiene la fantasía
La marca Chappell Roan no existiría sin la constelación de mujeres que han moldeado su identidad visual. Desde la visión global de Ramisha Sattar hasta la producción precisa de Gia Rigoli y el diseño de vestuario de Genesis Webb, el trabajo femenino aquí no es solo representación, se trata de dirección artística, producción ejecutiva y control narrativo.
En 2025, cuando aún se cuestiona si las mujeres tienen cabida en áreas técnicas como la cinematografía o el montaje, los videos de Roan funcionan como prueba viviente de que el talento no tiene género, y que una mirada femenina puede cambiar el tono, el ritmo y la forma en que contamos historias en la música pop.
Lo que hace de Chappell Roan una figura tan fascinante no es solo su música, sino cómo entiende el video como herramienta para construir un relato mayor que el de una canción individual. Cada pieza dialoga con la anterior, creando un archivo visual que, dentro de unos años.
Con “The Subway” marcando un nuevo pico creativo, y sin un segundo álbum en el horizonte cercano, el tiempo de espera puede ser una bendición. Porque si algo ha demostrado Roan es que su arte no se apresura, se cocina a fuego lento, rodeada de mujeres brillantes que entienden que en el pop, la estética no es un adorno… es la revolución.
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