Por: Irene Adad | @ireneadb
¿Sería difícil de creer que los grandes CEOs y billonarios en realidad vienen de otro planeta o que dentro de sus planes está aniquilar a la especie humana? Sin duda estas figuras públicas evidencian el abismo que existe entre las diferentes clases sociales y, a su vez, son el centro de diversas discusiones donde la balanza va de un extremo al otro: idealización o guillotina. Yorgos Lanthimos explora estas ideas en Bugonia, su última película que tuvo su estreno en la edición 23 del Festival Internacional de Cine de Morelia.

En 2003, el director surcoreano Jang Joon-Hwan realizó Save the Green Planet donde exploró la posibilidad de que una especia alienígena estuviera infiltrada en la Tierra, haciéndose pasar por líderes de grandes compañías. A pesar de que se empezaba a popularizar la teoría de David Ickesobre los reptilianos, la película fue recibida con diversas críticas y sin un éxito significativo en taquillas. Veinte años después, CJ Entertainment le propuso a Joon-Hwan hacer un remake internacional. Así es como Bugonia, la nueva versión de Save the Green Planet, llegó a las manos de Ari Aster como productor.

La reinterpretación, bajo el guion de Will Tracy –conocido por The Menu y Succession-, actualiza la historia para darnos a conocer a nuestros tres personajes principales: Michelle Fueller –Emma Stone– la directora ejecutiva de una farmacéutica llamada Auxolith; Teddy Jesse Plemons– un apicultor dolido y obsesionado con los aliens que viven entre nosotros, y Don –Aidan Delbis–, el fiel acompañante y primo de Teddy.

Desde el inicio del filme, Lanthimos presenta dos realidades paralelas: la de Michelle contra la de Teddy y Don. Sin embargo, la vida de los personajes se cruza cuando Teddy prepara una emboscada para secuestrar a la directora ejecutiva de Auxolith, bajo la certeza de que es una alienígena preparada para terminar con la humanidad. Después de ser capturada, Michelle despierta en un sótano cubierta de antihistamínicos desde la punta de los pies hasta la cabeza y, para su sorpresa, está completamente rapada. Teddy procede a explicar sus motivaciones y observaciones:
1. El pelo es una forma de contacto con su nave espacial, por eso tuvieron que cortarlo por completo.
2. Los pies alargados y las cutículas finas son rasgos clave de un alien.
3. La farmacéutica donde trabaja Michelle –y Teddy– ha tenido un papel fundamental e innegable en el colapso de diversas colonias de abejas.
4. El declive en la salud de su madre ha sido causado por los efectos de los fármacos.

Sin duda, las pruebas presentadas tienen una naturaleza conspiratoria y paranoica, enfocadas en aspectos físicos triviales que en la mente de Teddy, de alguna forma, se conectan con la maldad corporativa sin necesariamente hacer una conexión directa entre ellas. Es decir, cómo encontramos el puente entre los intereses económicos de una farmacéutica y el hecho de que su directora viene del planeta Andrómeda.
Michelle, por su lado, intenta convencer al par de secuestradores que ella no es un alien, pero que si insisten tajantemente en que lo es, no le quedará más que fingir ser una criatura extraterrestre. El director a lo largo de la cinta logra establecer un juego con la audiencia, una especie de acto de magia, donde nos persuaden ambos lados. En momentos le creemos a Teddy, en otros a Michelle; quizás quien se acerca más a lo que el público atestigua es Don: él mismo no está seguro de que la CEO realmente sea una alienígena y mucho menos que su misión sea destruir laespecie humana.

Lo anterior es uno de los grandes aciertos de Bugonia en el contexto actual. Nos dejamos seducir por cientos de opiniones, conspiraciones y semievidencias que, a pesar de parecer increíbles, se vuelven una realidad en nuestra psique. Estamos en constante búsqueda de una respuesta que se acomode a nuestros valores y creencias. Así, Lanthimos nos mantiene a la espera de encontrar un cacho de evidencia más al rompecabezas de Teddy.
A diferencia de Save the Green Planet, el remake decide adoptar un nuevo nombre. El concepto ‘bugonia’ viene de un relato de Virgilio donde narra el nacimiento de abejas a partir del cadáver de un becerro, similar a la generación espontánea. En el relato, Aristeo, un apicultor, ve cómo mueren sus abejas por un castigo que los dioses han puesto sobre él. No obstante, logra obtener nuevos enjambres por medio de la bugonia. Podríamos decir que Teddy tiene una experiencia parecida a la de Aristeo, pero la única manera de obtener sus abejas de vuelta es aniquilando a las criaturas extraterrestres que nos rodean.

Asimismo, Teddy es testigo de la extinción de estos insectos por un fenómeno llamado “Trastorno de Colapso de Colonias” donde la población completa desaparece de manera misteriosa. Esta desaparición es atribuida a Auxolith y sus pesticidas y, a la vez, funciona como una metáfora para la pérdida de comunidad a costa de vivir bajo ideologías corporativas y alienígenas –extranjeras, externas, extrañas–.
Incluso, en este juego entre que es y no es extraterrestre, Michelle habla de lo egoísta y cruel que es la especie humana, de cómo se nace con un gen predispuesto al suicidio y cómo ella misma adopta este comportamiento –¿para hacerse pasar como humana?– donde pretende ser flexible con sus empleados, respetar sus derechos y un falso interés por la diversidad. Por esto es que, en palabras de Mark Fisher, nos resulta más fácil imaginar el fin del mundo que el fin del capitalismo. Aún con la amenaza alienígena de terminar con los humanos.

Las actuaciones logran transmitir la angustia y manipulación que cada uno de los personajes atraviesa. Stone, nos hace sentir cercanos a Michelle, nos convence con sus palabras y expresiones faciales y, hasta por un momento, nos hace sentir que somos igual que ella con su termo Stanley o mientras canta Good Luck, Babe! Una trampa. La posición de poder de Michelle no nos hace igual a ella. Plemons, por su parte, encarna la inseguridad y la paranoia de su personajeque, poco a poco, pierde el contacto con lo que está frente a él.
Yorgos Lanthimos, de la mano de su equipo, logra explorar la avaricia, la otredad y el deterioro de la sociedad en tiempos de la posverdad por medio de la comedia, el horror y la ciencia ficción. Así, vuelve a traer a la conversación Save the Green Planet para reinterpretar una historia que hoy, más que nunca, se siente cercana y sobre todo específica al contexto estadounidense.
Stills: Universal Pictures










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