Por: Andrea Rendón |@andrearendon__
Rust Cohle, el personaje tan famoso interpretado por Matthew Mcconaughey de True Detective, es una de las razones por las que estoy escribiendo este artículo. Sus particulares monólogos en la serie y sus desconocido pasado que más de una vez me ha tenido pensando acerca de lo que vivió para tener tantas ideas y su terquedad por resolver un caso que no tiene nada lógico. Y es esto, ese caso no tenía nada lógico, la única explicación a algo tan horroroso debía ser algo sobre natural y no humano, una maldad fuera de esta tierra, algo tan antiguo como el mundo que se apodera de la gente. En México, cada día pasan cosas terribles y fuera de toda explicación racional. ¿Qué ser humano es capaz de hacerle tanto daño a otros seres vivos o cómo alguien es capaz de desaparecer a alguien? Hay veces que preferimos cegarnos y no pensar en eso, pero esa clase de maldad sin explicación es la que nos ha hecho pensar desde siglos atrás que debe de haber una explicación, y es por eso que H.P Lovecraft inicia todo con el horror cósmico y Cthulhu.
La primera vez que vi TRUE DETECTIVE, tenía mucho miedo. Regularmente le atino a las tramas de lo que pasa en series de este tipo: ya sé quien fue, seguro este hizo esto por x situación; y termina siendo cierto. Desde niña me han gustado las historias de fantasmas, de detectives e historias que siempre el detective termina encontrando las pistas para encontrar al malhechor. Por eso me apasionó tanto MINDHUNTER, pero eso es otro tema. Pero en esa temporada, no podía pensar que pasó. No había manera de averiguarlo. Los Tuttle, ok, sí, se veía venir algo así, pero no tenía sentido lo que pasaba y porque aparecía un lugar llamado Carcosa ni un Rey Amarillo. Eso realmente me empezó a espantar pero no podía dejar de verla. Al terminar, me puse a investigar más sobre el tema y llegué al horror cósmico. Investigué de que iba cada símbolo, terminé de ver las otras temporadas, ninguna al nivel de la 1 y me enganchó este universo en donde lo pagano sigue en la Tierra y seres de otro mundo están aguardando, llevando su maldad a un grupo de personas que quieren su regreso.
¿Por qué que otra explicación puede haber a hechos tan atroces como secuestros de niños más que un anciano en medio de la nada esté hecho de maldad y un culto antiguo? Es algo que la mente de muchos no puede comprender.
Comencé a leer a H.P. Lovecraft pese a que me daba cierto miedo. Y ya no he podido parar. Estoy absorta en esas lecturas oscuras con personas que se dejaron llevar por el esoterismo y la magia. Una de las cosas que más me llamaron la atención fue la manera en que los creadores de la serie juntaron esta mitología con un tiempo tan actual y hacerla ver que es real y no un asunto de fantasía.
En “La Llamada de Cthulhu”, un investigador de la policía llamado Legrasse se encuentra con una especie de culto antiguo y pagano en Maine, en donde encuentran una estatua de materiales que no existen en la Tierra. Un grupo de personas se juntan en los bosques espesos y pantanosos de la región para llevar a cabo ciertas ceremonias que espantan a los lugareños mientras varios vecinos han desaparecido. Esto nos recuerda mucho a la primera temporada y a los extraños asesinatos que se dan en Nueva Orleans. Mientras la historia del relato avanza, se juntan ciertas historias que le dan forma al ser al que le rinden culto y termina siendo una historia con muchas vertientes, también ciertos parecidos con la nueva temporada de True Detective, en donde señalan que un grupo de esquimales en Alaska realizan ritos semejantes y bastante oscuros en la zona, los cuales, los lugareños también huyen de ellos. Todos terminan adorando a la misma entidad antigua llena de maldad y que quieren que resurja.
Este tema no está tan explicado en la primera temporada, pero al llegar a Ennis, Alaska en la cuarta temporada de la serie de la mano de Issa López, parece tomar forma. Bien lo dice Rose Aguineau: “Ennis es como la cortina del mundo y se empieza a desdibujar sus bordes, ahí aparecen los muertos”; y tal vez sea cierto. Los confines del mundo nos dejan una sensación de pérdida y misterio inexplicables. ¿Qué vivirá en los sitios oscuros que no conocemos? ¿Fuimos los primeros en estar aquí? ¿Qué se esconde en la soledad de los campos abiertos? ¿La gente ha olvidado que éramos antes?
Me gustaría retomar “La Caída de la Casa Usher”, la cuál también acabo de terminar de ver en Netflix. Ahí también un personaje sabe que ha visto cosas inexplicables en el polo norte. Una mujer vestida de blanco, peleas salvajes y recuerdos que no quiere mencionar. Mucho se ha mencionado en la relación de los relatos de Poe y Lovecraft, muchos eruditos lo han hecho y no me quiero meter en esos temas ahora mismo. Pero sí en que ambos creían que más allá de los confines del planeta, hay cosas que no nos podríamos imaginar ni explicar. Historias antiguas que pueden proceder de la maldad y como éstas llegan a nosotros.
El tema de la nueva temporada de TRUE DETECTIVE es una continuación a la investigación de la primera, en donde una espiral que explica lo infinito y lo antiguo, aparece en cuerpos que han sido tratados con una maldad inexplicables: ojos sacados por ellos mismos, desnudos en el frío sin piedad, una mujer asesinada con odio y heridas en forma de estrella. ¿Una reina azul? Tenemos un Rey Amarillo, pero esta temporada dice: ella ha despertado. ¿Quién es ella? ¿Otra entidad antigua semejante a Cthulhu pero en el frío recóndito? ¿Qué la hizo despertar? A Cthulhu lo trataron de despertar mediante ritos y expediciones. ¿Será que el asesinato terrible de Anna la trajo de vuelta? El símbolo del oso polar tuerto recuerda al peluche de Holder, el hijo fallecido del personaje de Jodie Foster. Se podría creer que estas figuras de la antigüedad cobran venganza por el cambio climático, pero la muerte de los científicos no tendría sentido, pero sí, la maldad no tiene un sentido directo.
Hay muchas teorías que ahora mismo se me ocurren, tal vez esta Reina Azul despertó y trajo consigo la maldad y destrucción de la humanidad con nosotros. Pero alguien o algo la hizo despertar y salir de su lugar. En estos dos episodios se deja entrever que en Ennis es algo común ver a personas ya fallecidas en algún momento de la larga noche, cuando el día y la noche se funden en una sola. No hay un ciclo del tiempo perceptible y ellos lo saben.
Queda esperar los siguientes episodios para saber que ocurre, pero mi cabeza no deja de hacer teorías y necesito ya la continuación.
Gracias Issa López por traernos estas historias de vuelta, un gusto para todos aquellos a los que nos gusta estar investigando y tenemos un “nerd” adentro de nosotros.
Girls at Films 
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