Por: Laura Uribe | @Lauu_Uribe
Un diner en medio de la nada, con personajes que actúan violentamente sin pensar en las consecuencias son los ingredientes para el desastre de una noche sangrienta que cambiará el destino de Nancy, protagonista de Last Straw, ópera prima del director Alan Scott Neal.
Neal, quien antes había participado como encargado de casting en series como Euphoria, The idol y The Rehearsal, entrega un thriller que con muy pocos elementos de efectos especiales y una producción muy sencilla logra tener una historia original pero con las características clásicas del género.
Situada en un área rural de Estados Unidos, la cinta se centra en Nancy (Jessica Belkin), una chica que trabaja en el dinner de su padre, y quien al principio de la película se da cuenta que está embarazada y el padre parece ser uno de sus compañeros de trabajo. Durante los primeros minutos podemos ver el hartazgo e indiferencia de Nancy con su propia vida lo cual no cambia ni siquiera cuando se da cuenta del embarazo.
Nancy se lleva bien con la mayoría de sus compañeros, el problema es que ellos no la ven como una figura de autoridad sino solo como la hija del jefe. A la vez de lidiar con esto ella también se enreda en una discusión con un grupo de adolescentes a los que amenaza con llamar a la policía si no se retiran del restaurante, a lo que ellos le responden con otra amenaza.
Después de que Nancy se queda sola cubriendo el turno nocturno , empieza a escuchar ruidos afuera que inmediatamente la alertan y se da cuenta de que hay alguien vigilándola. Cuando un grupo de hombres con máscaras hacen su aparición la cinta empieza a tomar otro ritmo mucho más dinámico y la cámara ya no deja nunca a Nancy mientras vemos su lucha por sobrevivir esa noche.
Last Straw tiene algunas referencias a cintas como The Strangers (2008) con una premisa parecida y podemos encontrar elementos similares: las máscaras, persecución, y la violencia extrema que es lo dirige a los personajes. Además de las ya clásicas características el director también decidió agregar temas sociales y políticos cuando vemos los problemas de adicción de opioides de varios de los personajes, la situación del control de armas en Estados Unidos, y la masculinidad tóxica presente todo el tiempo y a la que debe enfrentarse Nancy.
La fotografía en Last Straw es clave para situarnos en el reducido espacio del dinner en donde transcurre prácticamente toda la acción, con encuadres y una iluminación que recuerdan a otras películas como Drive (2011). En cuanto empieza la persecución se podría pensar que todo lo que viene a continuación es predecible, pero la historia da un giro de tuerca en la mitad cuando se descubre el misterio de quiénes son los hombres enmascarados.
Esta cinta es una propuesta en el género de home invasion que muestra al público diferentes perspectivas de varios personajes en una sola noche, aunque siempre centrándose en Nancy y su lucha emocional y física.
Last Straw podrá verse en el festival Mórbido este viernes 3 de noviembre a las 21:00 hrs en Cinepólis Diana.
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