Film Review #BlackCanvas2023: The things i tell you

Por: Pamela Muñoz

“No te quiero asustar, pero suena como que te puedes enamorar de ese dude”: tal vez sea lo que menos queremos escuchar de nuestra mejor amiga, ¿pero por qué?, The things i tell you es la importancia de decirnos, de nombrarnos, de encontrar las palabras para narrarnos; los limites de tu lenguaje son los limites de tu mundo, Wittgenstein. A veces no queremos caer en el amor porque no queremos ser vulnerables, todas las maneras en las que no queremos ser amadas salen a la superficie; pero en realidad es como decía el meme que me mando una amiga hace poco: i’m in a loving relationship (y un dibujo de una mujer feliz), so now: all my fears i’m unlovable come to the Surface to be healed (la misma mujer, pero ahora con los ojos hundidos en un negro absoluto). Traducción: la sanación también puede ser dolorosa, aunque sea a traves del amor.

Como bien lo menciona Diogo (el hombre a ser posiblemente amado por Dani), el amor en la vida real parece ser evaporado por lo que leemos o escribimos sobre el, pero en realidad nadie lo conoce. Hablamos poco de el en nuestra rutina. O en mi caso, me niego hablar del amor por temor a ser señalada como una mujer que habla del amor: suicidio al feminismo, y que decir del repele a que te ubiquen como la cursi. Tal vez algunas mujeres fúricas deseamos romper con la falsa idea de que las mujeres siempre hablan del amor, pero en realidad al negarlo, no solo nos negamos a nosotras mismas, sino estamos cediendo ante el corrupto sistema que quiere arreglarlo todo con armas.

Creo en la valentía de Daniela y en la de todas las mujeres que exponen su vida personal como estimulo para mejorar la vida de otras mujeres, reflejarnos en el arte de otras mujeres mediante sus testimonios personales es una manera de expandirnos. The things i tell you es para mi eso. ¿A quién acudimos cuando tenemos la necesidad de contar nuestros deseos?, ¿Cuáles son nuestros miedos y deseos cuando conocemos a esa persona que nos hace sentir bien? ¿Por qué nos resistimos muchas a merecer amor?

Las ganas de sentir algo por alguien a veces parece venir en fragmentos, ciclos, y en el mejor de los casos de la manera más orgánica posible. “Ganas de enamorarme, no de él, solo de enamorarme” … una de mis frases favoritas del corto, ¿pero que es lo que realmente implica enamorase sin atribución a una persona? ¿será un mecanismo de defensa que nos “protege”?, ¿ó acaso será una manera de vivir el amor de una manera libre, sin apegos? Pensándolo bien, ni si quiera sé si sea posible, de mis cosas favoritas del amor son las personas, y las cosas que nos decimos, The things i tell you. El juego.

Tal vez el miedo a enamorarnos viene de la manera en que nos decimos que no merecemos ser amadas por ser como somos. Dani y Diogo se preguntan si el volverse parte de la rutina de alguien implica una de las características más complejas del amor (“te conviertes en parte de la rutina de alguien y eso es lo difícil”). A mi mamá siempre le gusta la misma frase de Chavela Vargas: “No hay nadie que aguante la libertad ajena; a nadie le gusta vivir con una persona libre. Si eres libre, ése es el precio que tienes que pagar: la soledad”, y pensándolo bien, creo que hay una no tan clara ecuación entre rutina y soledad. Yo simplemente reacciono al desgaste de mi madre y al miedo de un amor rutinario con la esperanzadora idea de Bukowski: “El amor de un solitario es el más auténtico que puede haber. Él te ama por elección y no por necesidad”.

The things i tell you nos lleva a eso, a explorar la incertidumbre del amor en sus términos más espaciales, temporales y geográficos.

“Ninguna de mis amigas diría que hoy entiende algo sobre el amor y sobre el sexo o sobre todo lo que hay en el medio y a los costados. Las más sabias ya no aspiran a entender nada”

_{Tamara Tenenbaum (El fin del amor)}