Por: Lily Droeven | @lilydroeven
El largometraje documental Pedro, ópera prima de Liora Spilk es un tierno y cómico retrato del reconocido artista plástico Pedro Friedeberg, a quien Liora admira profundamente. La directora, que también ha trabajado como editora y montajista, lo persigue a través de cartas escritas a mano, llamadas telefónicas, así como eventos públicos a los que asiste y Pedro se deja filmar. Es así como Liora se convierte en la coprotagonista y narradora construyendo durante diez años un retrato humano del artista para inmortalizarlo y que la gente lo conozca más.
Lejos de mostrar una mirada intrusa, Liora se muestra bastante respetuosa para captar al artista en su esencia más humana por lo que este acercamiento da como resultado una inolvidable y emotiva celebración de la amistad mientras que ella reflexiona sobre su proyecto cinematográfico.
Pedro ha sido proyectado en el FICUNAM, en el Festival Internacional de Cine de Morelia y en Ambulante Gira de Documentales de este año, además esta semana se estrena en las salas de cine y tuvimos la oportunidad de tener una breve pero agradable plática con la directora Liora Spilk sobre la creación de su documental, los retos y aprendizajes de la producción, la importancia de la amistad intergeneracional y sus inspiraciones como directora.
GaF: Primero que nada, ¡Gracias por aceptar la entrevista y felicidades por este documental y por tu nominación al Ariel como Mejor Opera Prima! ¿Qué te inspiró a inmortalizar la vida y obra de Pedro Friedeberg a través de un largometraje documental?
LS: ¡Muchas gracias Lily! Pedro es mi artista favorito desde chiquita. Mi primer recuerdo es una pintura de él que colgaba en casa de mi abuela que me daba miedo y a la vez me encantaba. Cuando estaba estudiando en la UNAM tenía que hacer un cortometraje sobre alguien que admirara y escogí a Pedro como excusa para irlo a conocer. Mi abuela lo conoció porque es historiadora del arte y fue mi portal al mundo del arte y de la cultura; entonces lo fui a entrevistar y me enamoré, lo medio perseguí por diez años hasta que me permitió hacer la película.
GaF: Al alargar lo que en un principio planeaste como cortometraje al formato documental, ¿qué limitates tuviste y como fue el proceso de financiamiento?
LS: La limitante que tuve es que no tenía idea de lo que estaba haciendo, entonces fue un poco como la vida misma, como ir creciendo, como ir entendiendo, como ir aprendiendo a hacer cine, aprendiendo a hacer la película porque yo de profesión y de oficio soy montajista, soy editora, no sabía dirigir, no tenía idea de lo que estaba haciendo y fui aprendiendo a hacer la película, conforme lo hacía. El financiamiento los primeros diez años los financié yo, sacaba chambitas y podía comprar un lente, Empecé a trabajar muy joven como editora, con un poco financiando logré comprar mi cámara y con eso ya tuve la libertad de poderlo filmar.
Obviamente perdió la película en términos de calidad cinematográfica y técnica, pero creo que es justo por esa falta de pretensión de calidad tecnológica o cinematográfica que se pudo lograr esa intimidad porque justo cuando van a entrevistarlo un grupo de diez personas a su casa él se enoja y no los deja grabar; justo esta poca pretensión de estar con la camarita yo sola fue en parte lo que me dejó entrar. Después tuvimos a EFICINE para la postproducción y eso ayudó para poderla acabar.
GaF: Uno de los momentos más interesantes es ver a Pedro trabajando en sus obras, ¿Cómo fue verlo de cerca trabajando y cuál es su proceso creativo?
LS: Lo que me parece increíble es que Pedro es un artista de oficio, es un pintor de oficio, que ya no existen muchos. Él pinta todos los días con regla, con lápiz, con plumón, es una especie en peligro de extinción, es muy impresionante que ves su obra y piensas que lo hicieron en un programa digital y que igual es una obra increíble y cuando te das cuenta de que lo hizo a mano es como irreal, no se puede concebir que eso exista.
Siento que no hay un filtro, no hay diferencia entre su cabeza y su obra como él mismo lo dice. Él y su obra son una misma cosa y su proceso creativo es su proceso de vida, pinta para vivir y vive para pintar; pinta cuatro o cinco horas al día y lo que hace es talacha, pintar y pintar. Es muy dedicado.
GaF: Algo que llamó mi atención es que el documental incluye maravillosos detalles visuales, animaciones y gráficos ¿Podrías contarnos un poquito más al respecto?
LS: Es autorreferencial el cine personal que parece que lo hace uno solo. Como te estaba contando, por mucho tiempo estuve cargando con mi camarita y haciendo la película sola, pero esta película no nació hasta que tuve este equipo increíble: mis animadoras, mis productoras; ante todo en este proceso ya de exhibición, la película nació cuando ya tuve un equipo. Mi directriz siempre era: «¿Qué haría Pedro?», «Esto le gustaría a Pedro. Esto tiene congruencia con el personaje de Pedro», entonces la animación es muy artesanal. Esa primera animación fue hecha a recortes cuadro por cuadro, es super artesanal, super a la antigua y siempre a la antigua es mejor para mí. Es lo que yo siento y fue la directriz que llevé para tratar de que la película se hiciera y se asemejara al personaje que representaba.
GaF: Lo que me gustó de la animación es ver a Pedro yéndose y tu yendo detrás de él.
LS: Si, es increíble. Es una metáfora perfecta de la película. Yo persiguiendo a Pedro a través de su mundo, a través de su obra, es lo literal.
GaF: Pedro ha tenido una muy buena recepción por parte de la audiencia y la crítica en Festivales, así como la nominación a Mejor Ópera Prima en los Arieles, ¿qué significado tiene para ti todo esto?
LS: Ante nada en los Arieles me siento sin poder creer en el honor que es estar nominada con tantas mujeres. Esta edición de los Arieles está llena de poder femenino con muchas de las mujeres que conozco personalmente y que son personas increíbles, que tienen una voz propia que no me da más que mucho orgullo estar parada ahí con ellas. En cuanto a la recepción de la película para mí que la gente se ría en la sala, para mí eso es la buena recepción, que puedan pasar un tiempo, que le entren a este viaje, se diviertan con Pedro y conozcan a esta persona, porque en la Ciudad de México yo creo que la mayoría de las personas reconocemos la iconografía de Pedro, sus perspectivas arquitectónicas, la silla-mano, pero no sabemos quién es la persona que hizo esas cosas ni conocemos su nombre y yo espero que con esta película se acuerden de su nombre y sepan quien es.
GaF: ¿Cómo ha sido para Pedro vivir esta experiencia y qué opina al respecto?
LS: La primera vez que Pedro la vio estábamos en una sala de cine él y yo solos, toda la película se quedó callado y yo pensé que no le gustó. Acabó la película, volteó y me dijo «mira, no está tan mal como pensaba» y ese fue el mayor halago. Ya después en las funciones que hicimos con gente conocida de él y con amigos la gente se rió y ese es el mayor halago, que se rían y puedan disfrutar, que Pedro es mi persona favorita en el mundo. Como digo en la película, estoy enamorada de él, hay muchos tipos de amor, es mi persona favorita, agradezco el gran privilegio que ha sido poder acompañarlo a ratitos y que me deje estar ahí.
GaF: Además es una muestra de amistad intergeneracional entre Pedro y tú, también cuando aparece Ida Rodríguez Prampolini «La Chacha»:
LS: Eso que dices es un tema super importante para mí. Es bien importante porque cada vez es más grande la brecha entre la vejez y la juventud y yo creo que tiene mucho que ver con la tecnología, con el estilo de vida, con la vorágine del capitalismo y creo que es un recordatorio también a no dejar a nuestros viejos, a seguir con nuestras amistades, a hacerles honor a las generaciones de la gente que nos dejó tanta cultura, esta película también es un homenaje a esas personas que nos enseñaron y dejaron tanto, no solo a Pedro, a sus amigos que salen en el documental y a mí me parece muy lindo que José Luis Cuevas, La Chacha no salen como personajes históricos dando cátedra, se inmortalizan como humanos, es lo que me parece super lindo.
GaF: ¿Quién es tu directora favorita y quienes más te inspiraron a crear este documental?
LS: Mi directora inspiración máxima es Agnès Varda, la gran directora documentalista francesa, amante de los gatos, pelirroja y chaparrita por excelencia, Agnès Varda es mi gran inspiración a hacer un cine personal que tiene consecuencias emocionales y sociales. Ella es la maestra y realmente todos los documentalistas como Grey Gardens (dir. Albert y Albert David Maysles, 1975); hay una tradición del documental subjetivo que es en quien yo me inspiré como Jonas Mekas pero Agnès Varda es mi mayor inspiración
GaF: ¿Cuáles son tus futuros planes en la industria del cine? ¿Te gustaría hacer ficción?
LS: Me considero documentalista. Me gustaría hacer otras películas quizá retratando a otros personajes. Me gusta mucho el documental de personajes, la exploración humana que eso conlleva, la verdad la ficción no es un animal que yo conozca como directora, tengo trabajo de editora, sigo trabajando en ello todos los días y me encanta ser montajista, pero si me gustaría dirigir más documentales.
GaF: ¿Qué consejos les darias a las jóvenes directoras que quieren ser documentalistas?
LS: No dejen que los errores les paren. Mi gran aprendizaje de este documental es que hay que tener el error como un mensaje del universo, que no les tumbe, que una se pueda reír de sí misma y de sus errores, que como me dijo mi abuela «¡Ya acábalo o tíralo a la basura!»; terminen sus proyectos, no tengan miedo de que sean fallidos, sepan reírse de sí mismas para poder acabar.
Girls at Films 
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